“Time served”, escuchó Alejandro Burzaco, el ex CEO de Torneos que en 2015 se declaró culpable de los tres cargos que pesaban sobre él en la investigación por el FIFAgate.
El ex zar de la televisión argentina se alivió.
En inglés, la frase de Pamela Chen, la jueza del distrito Este de Nueva York a cargo de la causa significa “tiempo servido”: la información que el ejecutivo argentino les brindó a los investigadores del Departamento de Justicia de Estados Unidos como testigo estrella lo salvó de la cárcel.
No irá preso y no se pondrá el traje naranja.
No volverá a la Argentina y seguirá colaborando con la Justicia estadounidense..